Hay días en los que abrís la heladera, no tenés ganas, no sabés qué hacer, o no tenés mucho. Para eso, tener una “caja de salvataje” con básicos que te resuelven una comida rápida es una idea simple, barata y útil.
¿Qué es la caja de salvataje?
Es un espacio (puede ser una caja literal, una canasta o una parte de la alacena) donde juntás ingredientes no perecederos que te permiten cocinar algo sin ir al súper ni pensar demasiado.
Qué poner adentro:
🛒 Básicos secos y versátiles
Fideos
Arroz
Lentejas partidas
Harina (común y leudante)
Puré de tomate
Caldo en cubitos
Atún en lata o caballa
Arvejas en lata
Azúcar y sal
🧂 Condimentos que salvan
Ajo en polvo
Orégano, pimentón
Mostaza
Salsa de soja
Aceite y vinagre
🍪 Extras útiles
Polenta
Sémola
Galletitas saladas
Leche en polvo o larga vida
Cómo usarla:
Cuando no sabés qué hacer, abrís la caja, mirás qué hay y combinás con lo que tengas fresco: huevos, alguna verdura, queso o lo que haya en la heladera.
Sirve para hacer desde una salsa rápida hasta una sopa, unas croquetas o una tarta improvisada.
💡 Consejo final:
Tener tu “caja de salvataje” es como tener un respaldo en la cocina. Te evita caer en delivery o en comer mal por apuro. ¡Y se arma una sola vez!