Una heladera ordenada evita que se eche a perder la comida, te ayuda a ver lo que tenés, y te permite ahorrar tiempo y plata. Con unos trucos simples, los alimentos te van a durar mås y vas a cocinar con menos estrés.
đ§ș 1. MantenĂ© todo limpio
SacĂĄ todo una vez por semana, pasĂĄ un trapo con agua y vinagre o con detergente suave.
TirĂĄ lo vencido o en mal estado.
RevisĂĄ especialmente los cajones de frutas y verduras.
đ„ 2. UsĂĄ los estantes segĂșn la temperatura
Estante superior: comidas listas, sobras, yogures, postres.
Estante del medio: huevos, fiambres, lĂĄcteos.
Estante inferior: carne cruda, pollo o pescado (si no va al freezer). Siempre en un recipiente por si gotea.
Cajones: frutas y verduras.
Puerta: bebidas, manteca, aderezos (acĂĄ es donde hay mĂĄs cambios de temperatura, por eso no es ideal para huevos ni lĂĄcteos).
đ§ 3. UsĂĄ envases transparentes
GuardĂĄ todo en recipientes que te permitan ver lo que hay.
AsĂ evitĂĄs olvidarte de las sobras o abrir cosas innecesariamente.
đŽ 4. EtiquetĂĄ sobras y comidas preparadas
Poneles la fecha y el nombre (con un marcador o cinta adhesiva).
Asà sabés qué tenés y cuåndo lo cocinaste.
❄️ 5. No sobrecargues la heladera
DejĂĄ espacio para que circule el aire frĂo.
Si la heladera estĂĄ muy llena, enfrĂa mal y la comida se arruina antes.
đ 6. UsĂĄ el sistema “primero lo viejo”
Lo que compraste o cocinaste antes, usalo antes.
Ponelo adelante y dejĂĄ lo nuevo atrĂĄs. Es la mejor forma de que nada se venza sin que te des cuenta.
Una heladera ordenada no solo se ve mejor: te ayuda a comer mejor, tirar menos y cocinar mĂĄs rĂĄpido.